Una de las tradiciones más populares es el Pumpkin Patch, donde familiares y amigos van a las granjas locales a escoger las mejores calabazas de la cosecha para decorar la casa o hacer el precioso y tradicional
carving de linternas. Aprovechando la ocasión las granjas, en la medida que pueden, organizan una especie de "parque de atracciones" para niños: laberintos entre las mazorcas de maiz, túneles con bloques de paja, trenecitos que dan vueltas, animales para acariciar, montones de calabazas, tiendas de regalos o decoraciones de temporada para los jardines, etc. Este tradicional evento "
it's a must go"!!! Especialmente si se tienen niños pequeños...la excusa perfecta para dar rienda suelta al corazoncito de niño que todos llevamos dentro y disfrutar del momento.
El mayor inconveniente de Uesugi Farms es que es demasiado popular. Las colas para comprar tickets eran interminables y frustrantes. Además solo había un único lugar donde comprar los tickets para todas las atracciones (el pase general para mi tenía un precio un tanto desorbitado si uno no pensaba ir al lugar con relativa frecuencia durante el mes de octubre). De modo que uno tenía que planificar las atracciones a las que quería ir de entrada. El resultado es que acabamos con varios tickets sin gastar porque las colas en cada atracción también eran interminables. Fue una lástima acabar con tan mal sabor de boca porque el lugar era fascinante, lleno de rincones y sorpresas para toda la familia. Probablemente es mejor idea ir entre semana para evitar la "muchedumbre" (con cariño) y, en cambio, disfrutar realmente de las atracciones sin perder el tiempo en las colas. Debido a la distancia (35 min de casa) aún resulta complicado para nosotros ir entre semana. El año que viene probablemente podamos montárnoslo mejor ...
Pumpkin Pyramid. Una enorme pirámide de calabazas. Me pareció leer que en el vértice más alto está la calabaza ganadora en tamaño pero no me informé demasiado al respecto.
Train. Uno de los favoritos, como no, es el tren que da vueltas a la granja y se disfrutar los originales decorados de temporada a bordo del pequeño trenecito a vapor.
Hay otros "
rides" populares como el Pumpkin Pete’s Enchanted Hayride; donde los niños y adultos se suben a bordo de un enorme trailer arrastrado por un enorme tractor y se da un paseo de 20 min por todos los rincones de la granja.
Por supuesto, no podían faltar los laberintos entre mazorcas de maiz (Corn Maze).
Pumpkin Blasters. Algo muy curioso fue el ver como la gente hacia cola para disparar calabazas pequeñitas a unas dianas (e incluso a una furgoneta vieja) a través de un cañón que, aunque no soy entendida en artillería, tenía un aspecto muy realista. Incluso llegamos a ver a una niña con chupete que, con ayuda de su papá, disparaba el aparatejo. Eric mismo estaba muy entusiasmado con el espectáculo y estuve dudando si sería una experiencia divertida y adecuada ... pero como no queríamos en ningún caso volver a hacer cola para más tickets la decisión fue bastante fácil.
Pony Rides. Si que nos pareció adecuado, no obstante, el montar a pony. Era la primera experiencia para Eric y le entusiasmó la idea. También había un Petting Coral (un corral donde se podían acariciar y alimentar a los animales) pero había que comprar un ticket a parte y experiencias de "petting farms" ya experimenta muy a menudo.
La semana pasada también fuimos al Pumpkin Patch de Giordano Farms. Como solo está a 15-20 min de casa y fuimos entre semana con unos amigos, la experiencia fue mucho más agradable a pesar de que las atracciones no eran tan exuberantes.
Toddler Hay Tunnels. Varios túneles construidos con bloques de paja (haystacks) fueron la diversión del día. Especialmente si se va con otros niños con los que pueda jugar a perseguirse (o las mamás que se suelten la melena, claro!)
Goat & Bunny Petting Corrals. Corrales de cabras ya tiene bastante experiencia pero la sorpresa fueron los conejos. Costaba $2 pero quien puede resistirse a estos
petting furry animals.
The Loose Caboose Ride. Más modesto que el de Uesugi pero también divertido era el trenecito (en realidad era un "caboose" que como Eric muy bien sabe es el coche que tradicionalmente iba al final del tren donde el maquinista dormía cuando tenía la ocasión) que daba vueltas por la granja.
No comments:
Post a Comment